1. No escribir un asunto llamativo:
El primer detalle que observa el receptor de un mensaje es el tema del mismo. Por tanto, si no utilizas una idea que llame a la acción, corres el riesgo de que el destinatario envíe el correo a la bandeja de entrada al confundirlo con una forma de spam o al considerarlo de bajo interés. Elabora una lluvia de ideas de posibles asuntos y elige aquel que tenga un enfoque práctico.

2. Concretar una fecha equivocada:
El Email Marketing también pierde eficacia cuando no se analiza el contexto temporal en un correo de venta. Existen periodos especialmente indicados para la venta como la Navidad. Intenta poner en relación tus productos o servicios con la esencia de una celebración. Por ejemplo, con motivo del día de San Valentín, puedes enviar un mensaje ofreciendo ideas de regalos para el Día de los Enamorados.

Además, el lunes no es una buena jornada para enviar información de este tipo puesto que la mayoría de las personas inician la semana con cierta pereza, concentradas en lo inmediato, motivadas por la prisa. Por el contrario, a partir del miércoles el ánimo aumenta ante la perspectiva del viernes. Y las emociones influyen de forma directa en las opciones de compra.

El diálogo con los clientes no es fluido si no tienes en cuenta que la fecha en la que contactas puede marcar la diferencia en la eficacia de tu misiva. Esto significa que no debes improvisar estas iniciativas sino desarrollar un plan de acción.

3. No tener una frecuencia de envío habitual:
Para que el vínculo con tus potenciales clientes sea verdaderamente próximo y cercano es esencial que establezcas una frecuencia periódica en tus mensajes. De este modo, tus lectores saben cuándo esperarte.

Lo ideal es que envíes un nuevo correo cada dos semanas ofreciendo información a tus suscriptores sobre las novedades en las actualizaciones del blog. Fomenta la relación próxima utilizando ideas que aportan un valor que va más allá de lo comercial.

No te concentres en cuántas personas te leen sino en la singularidad de dirigirte al lector utilizando un tono cercano y un lenguaje sencillo. Un error posible es abusar de la extensión del mensaje cuando lo ideal es priorizar la calidad de las palabras, más allá de la cantidad. Además, otro fallo frecuente es concentrar una gran atención en el inicio, pero descuidar el cierre y no hacer una llamada a la acción.

4. No realizar un envío de prueba a un correo personal:

Gracias al servicio de la plataforma MailChimp, destinada a la organización de campañas, tienes la posibilidad de enviar un correo electrónico de prueba a una dirección personal para hacer revisiones de formato, verificación de enlaces y ajustes ortográficos. Utilizando la opción de vista previa, observarás cómo será la plantilla del mensaje que recibirán los suscriptores en su buzón de entrada.

5. No tener un objetivo:
La comunicación de marca siempre tiene que estar orientada a un objetivo específico, concreto y realista. Si no tienes una meta clara, es mejor que no envíes un nuevo mensaje de Email Marketing. De lo contrario, solo generas ruido.

El principal error que todavía cometen muchos negocios es descuidar el marketing al concentrarse únicamente en una fórmula de difusión. Todavía hay muchos proyectos que no optimizan los recursos online. No cambies el nombre del remitente en tus mensajes y proyecta el valor corporativo en las palabras para consolidar tu marca. No olvides añadir el logo en cada email para una mejor identificación.