Para algunos, monitorear a la competencia puede sonar a un acto poco recomendable. Sin embargo, este concepto no se refiere a espiar para copiar o plagiar aquella estrategia que lidera el mercado. Acá, lo primero es actuar honestamente y de modo profesional, sin la idea de perjudicar al otro; sino que, de aprender de él, para luego tomar ese conocimiento y adaptarlo a tu empresa, sin perder tu identidad ni tu componente diferenciador. Pero este proceso de análisis comparativo, no solo tiene que ver con los competidores.

Entonces, ¿cuáles son los tipos y fases de Benchmarking?, ¿qué beneficios tiene para tu estrategia? Son algunas de las preguntas que nos ayuda a responder el sitio InboundCycle.

Entendiendo el Benchmarking: tipos y fases

Empecemos con los tipos que puedes aplicar en tu negocio. Existen cuatro opciones de diversa complejidad, que apuntan a distintos objetivos y requieren de diferentes recursos.

• • Interno: se ejecuta dentro de la misma empresa, así que la competencia queda al margen. Acá se comparan los procedimientos de una unidad o función operativa interna con otra más rentable que aquella que quieres mejorar.

• • Externo: es el más frecuente y ahora se considera a la competencia. Lo ideal es hacer un análisis FODA, es decir, identificar las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas, para descubrir en qué posición está tu empresa dentro del mercado.

• • Funcional: se hace un análisis del mercado global, comparando las funciones y procesos de tu negocio con las efectuadas por el resto de las empresas pertenecientes a tu sector, aunque no sean de tu ámbito de influencia. Pero no solo aprendas de sus aciertos y fortalezas, también mira sus puntos débiles.

• • Integral: aquí se necesitan más recursos humanos y económicos, además de herramientas de análisis e interpretación; porque el objetivo es realizar los primeros tres puntos descritos. Pero, como sugiere InboundCycle, en vez de abarcar demasiado, es preferible hacer mejoras paulatinas, para que la adaptación a los cambios internos sea gradual.

Y como todo proceso, esta arma de Inteligencia competitiva, engloba una serie de etapas, de las cuales depende su efectividad. Lo importante es que cumplas cada una de ellas.

• • Define lo que mejorarás: monitorea a tu empresa para identificar los criterios de evaluación comparativa, decide qué tipo de análisis harás y establece claramente tus objetivos. Acá también, la realización de un FODA será una excelente ayuda.

• • Arma tu equipo: evalúa si cuentas con el personal idóneo en cantidad y conocimientos para efectuar lo que definiste anteriormente. Si es así, organiza y designa las funciones correspondientes. De lo contrario, quizás necesites contratar asesoría o trabajadores externos.

• • Identifica a la competencia y comienza a analizarla: es fundamental que conozcas tu mercado, para definir cuáles son las empresas que considerarás. Toma en cuenta a aquellas que te inspiran y también a las que no lo hacen. Ambas te pueden entregar bastante conocimiento. Luego extrae los datos, límpialos y clasifícalos para mantener un proceso organizado y optimizar tu tiempo.

• • Analiza e interpreta los datos obtenidos: toma la información extraída de la competencia y compárala con los datos de tu empresa para ver cómo podrías lograr tus objetivos.

• • Establece las mejoras y aplícalas junto a tu equipo: aquí la organización también es clave. Es conveniente que definas meticulosamente los plazos en que se efectuarán los cambios y los recursos necesarios para ello. Además, no olvides medir las modificaciones para conocer su efectividad y tomar decisiones oportunas.

¿Cuáles son los beneficios para tu estrategia de Marketing?

Llegamos al momento de conocer cómo repercutirá la integración del análisis comparativo en tu empresa. Es un proceso que puede tomar semanas e incluso meses, pero que, al ser correctamente ejecutado, tendrá un impacto positivo en tu estrategia. ¡Veamos!

• • Mejora tu SEO: ya lo sabemos, existen diversos factores que repercuten en el posicionamiento orgánico en buscadores; y ciertamente, el análisis de la competencia ayudará bastante con esa tarea. Por ejemplo, podrás conocer cuáles son las keywords con las que logran llegar a los primeros lugares de las SERPs, compararlas con las tuyas y ver cómo puedes mejorar.

• • Incrementa el conocimiento de tu target y maximiza el engagement: tus competidores tienen un público objetivo semejante al tuyo, e incluso puede ser el mismo. Entonces, si descubres qué tipo de relación establecen con éste, mediante qué canales y cómo lo hacen; tendrás una guía para generar cambios que te permitan mejorar el compromiso que tienen con tu empresa.

• • Optimiza tu estrategia y entrega nuevas oportunidades de crecimiento: este proceso te hará repasar tu estrategia de Marketing, permitiéndote descubrir los puntos débiles y fuertes, que te darán la posibilidad de hacer los cambios necesarios para liderar.

Ahora, para concretar un proceso de Benchmarking, se necesitan herramientas bastante específicas. InboundCycle recomienda SimilarWeb, Ahrefs y Google Trends. Pero también puedes emplear SEMrush, Alexa y Woorank. Así obtendrás datos referentes a optimización para dispositivos móviles, usabilidad, SEO, interacción en redes sociales, estimación del tráfico, consejos técnicos, entre otros. Solo recuerda tomar a tu competencia como una fuente de aprendizaje y actuar profesionalmente.